lunes, diciembre 01, 2008

Cartas iban, cartas venían

Primera Misiva:

Srs. Metro S.A.

A través de la presente quiero manifestar mi molestia por el sistema de audio y televisión que se ha implementado en los vagones del metro de la línea 4. Finalmente, este sistema se ha convertido en una herramienta para la venta de publicidad, pero que produce contaminación acústica y ensucia la imagen de Metro S.A.

Ruego a Ud. reevaluar la instalación de este sistema, retirándolo y así entregar un servicio de mejor calidad a sus usuarios.

Les saluda atte.

Moebius



Respuesta:

Estimado Cliente:

Junto con saludarle cordialmente, damos respuesta a reclamo referido al volumen y programación de los Monitores de SubTV en los trenes de Línea 4.

Primero que todo, quiero agradecer su preocupación por la calidad del servicio que ofrecemos a nuestros usuarios. Respecto a su inquietud en particular, puedo informarle que, antes de la puesta en marcha del servicio de los monitores instalados en las estaciones de Metro de Santiago para todos nuestros pasajeros, se realizaron distintas pruebas técnicas y se concluyó que el sonido de los monitores no excede los niveles máximos permitidos según establece la Ley 16.744, relativa a Normas Sobre Accidentes del Trabajo y Enfermedades Profesionales. Sin embargo, en algunos momentos del día la sensación acústica puede ser mayor debido al movimiento propio de una estación, entiéndase en este aspecto la gran afluencia de usuarios y el desplazamiento propio de los trenes, no obstante, para asegurar un funcionamiento óptimo de estos equipos, el proyecto contempla la medición del nivel de audio en forma anual, sin que hasta ahora se hayan detectado anomalías respecto al nivel del sonido que establece la Ley mencionada.

El audio de los equipos de TV y plasmas están regulados según pauta operacional del entorno, para entregar una señal audible y pareja dentro de cada estación, además están configurados por tres niveles de volúmenes en decibeles que se programan, según el horario, desde la central de control de audio, estos niveles son alto, medio y bajo. Cabe mencionar que los tres niveles no necesariamente son iguales en todas las estaciones, ya que su estructura y acústica son diferentes, pero sí se mantienen estas tres opciones durante el transcurso de un día. En cuanto a la programación, está sujeta a definición según la parrilla horaria de avisadores que arriendan espacios de exposición comercial, otros contenidos son variados y enfocados a la cultura, entretención, información, educación, humor y entrevistas; todo dirigido a un público masivo transversal a los distintos tipos de usuarios que actualmente ocupan nuestro servicio, en tanto, el contenido musical es programado de acuerdo con las diferentes épocas musicales que fueron hit y que están en la memoria de la mayoría de nuestros clientes.

En referencia a la evaluación del sistema, de acuerdo a la última encuesta realizada en el primer semestre de este año 2008, la instalación de las pantallas en las estaciones y trenes de Línea 4 ha sido muy bien recibida por la mayoría de nuestros usuarios, quienes consideran la medida como un aporte para hacer más grata la espera y su traslado, y agradecen un poco de distracción e información durante sus viajes. No obstante lo anterior, y acogiendo su reclamo, hemos solicitado directamente a la empresa SubTV que realice una nueva revisión de los actuales volúmenes, especialmente al interior de trenes, y realice los ajustes correspondientes de detectarse anomalías, según lo programado.

Agradecemos el que nos haya planteado esta inquietud, puesto que ello nos permite detectar desviaciones entre el servicio efectivamente brindado y el servicio que de acuerdo a nuestros estándares de calidad, queremos y debemos entregar a nuestros clientes.

Sin otro particular y esperando una acogida favorable, le saluda atentamente,

Oficina Atención Clientes Línea 4-4A

Metro de Santiago

Segunda Misiva y respuesta a la respuesta
(Pensarán que uno es weón)


Señores Metro de Santiago:

El sistema implementado tiene por finalidad aportar nuevos recursos por la vía de arriendo de espacios publicitarios. Así es como se ha llegado a comercializar espacios para publicidad, como las paredes de las estaciones, las puertas de salida, el suelo, las ventanas de los vagones, el techo interior de los vagones y quizá qué otra cosa más se les pueda ocurrir a los inventivos publicistas (quizá nos exijan con la recarga de la tarjeta “bip” pegarnos un “stiker” en la frente con alguna marca publicitaria). Todas esas cosas hasta cierto punto se pueden tolerar, pero me parece un exceso la contaminación visual y acústica que se produce en la materia relacionada a mi reclamo.

Es cierto que la mayoría de los usuarios puede recibir muy bien y considerar “la medida como un aporte para hacer más grata la espera”, pero no es menos cierto que quienes hacen la encuesta (o quien mandata a hacerla) son parte interesada. Por lo tanto, como instrumento y metodología de investigación, no deja de generar ciertas sospechas por el sesgo en que se pueda haber incurrido.

Agradezco a Uds. vuestra consideración al contestar con tanta contundencia y respaldo técnico al reclamo que les he señalado. La verdad es que la situación es un poco menos alambicada y su solución menos enredosa. Los televisores al interior de los vagones molestan y punto. Al igual que en los buses del Transantiago (del cual Metro es parte del sistema), como usuario, espero tener la oportunidad de recordarle al chofer (en este caso a uds.) que "la radio del vehículo podrá ser puesta en funcionamiento siempre que su volumen sea moderado y ningún pasajero se oponga” (Decreto Supremo 212 /92, artículo 50). En este caso, me opongo a su funcionamiento y espero que la fuente de emisión de sonidos, entiéndase televisores al interior de los vagones de los trenes del metro, de la línea 4, sean apagados.

Entiendo que Metro no se rige por las leyes del tránsito, pero tengo altas expectativas que Metro pueda cumplir con el espíritu de dicha normativa, con la ética y el respeto al pasajero.

Finalmente, agradezco a uds. por algo que debería ser común a todas las empresas: responder los reclamos.

Les saluda atte.
Moebius



... esto fue hace como dos semanas. Todavía espero la respuesta, eso sí, me dijeron que me sentara...

1 comentario:

Anónimo dijo...

el metro es una contaminación generalizada, manejada por virus y bacterias incapaces de percibir las falencias que han provocado en estos ultimos meses.

saludos, muy buen blog.-